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Campaña de vacunación: Y tu, ¿te has vacunado?

Éste es el lema de la Campaña de Vacunación de la Gripe 2020. Normalmente va dirigida a grupos de riesgo bien definidos, pero la crisis originada por la pandemia del COVID 19, hace que cobre gran relevancia en éste año

La gripe y COVID-19 son dos infecciones causadas por distintos virus, aunque cursan con una sintomatología similar y tienen alto riesgo de complicaciones severas, sobre todo en vías respiratorias

 

 La vacunación contra la gripe no solo tiene como objetivo disminuir incidencia de la gripe, sino también, reducir ellas posibles complicaciones que provienen de su desarrollo que son decisivas en el pronostico y evolución por una posterior infección por COVID 19. Por ultimo, conseguimos mejorar la detección de la COVID-19, evitando errores iniciales de diagnóstico.

¿ Quién se debe vacunar?

Tiene especial importancia la vacunación de los grupos de riesgo y de las personas que estén en contacto con los mismos:

  • Profesionales sanitarios.
  • Trabajadores de centros sociales residenciales o en centros de cuidados de enfermos crónicos.
  • Cuidadores principales de enfermos crónicos dependientes.
  • Estudiantes en prácticas en centros sanitarios y socio-sanitarios.
  • Personas que conviven con otras pertenecientes a grupos de alto riesgo.

Asimismo, se recomienda la vacunación en:

  • Profesionales de servicios públicos esenciales (policía, bomberos, protección civil).
  • Personal de instituciones penitenciarias y otros centros de internamiento.
  • Trabajadores de explotaciones avícolas y porcinas o en contacto con aves silvestres.

¿Qué se consideran grupos de riesgo?

Se establecen los siguientes grupos de riesgo:

  • Todas las personas mayores de 65 años, especialmente las que conviven en las instituciones cerradas
  • Personas con algún factor de riesgo (Mayor o menor de 65 años)
    • Enfermedades crónicas respiratorias, cardiovasculares y metabólicas, diabetes mellitus,
    • Obesidad mórbida,
    • Insuficiencia renal,
    • Enfermedades hepáticas crónicas,
    • Enfermedad celíaca, fístula de liquido cefalorraquídeo y enfermedad inflamatoria crónica (intestinal y artropatías)
    • Enfermedades neurológicas o neuromusculares,
    • Trastornos y enfermedades con disfunción cognitiva,
    • Asplenia, (ausencia de bazo, de gran importancia en la inmunidad)
    • Hemoglobinopatía o anemia, trastornos de coagulación
    • Inmunosupresión,
    • Implante coclear,
    • Cáncer.
  • Mujeres embarazadas (independientemente de la edad de gestación) y puerperio (hasta 6 meses tras el parto si no se vacunaron en embarazo).
  • Nacidos prematuros (antes semana 32, desde 6 meses hasta los 2 años).

¿ Cuales son los grupos a los que se desaconseja la vacunación?

No son muchas las circunstancias que desaconsejan la vacunación, así se evita en:

  • Niños menores de 6 meses,
  • Casos de antecedentes de reacción anafiláctica o alérgica grave a una dosis previa de la vacuna o uno de sus componentes

¿ Cuando tomar precauciones?

Existen situaciones en las que se ha de valorar otras situaciones:

  • Enfermedad aguda moderada o grave, con o sin fiebre (se recomienda posponer la vacunación)
  • Reacción alérgica al huevo,
  • Desarrollo del Síndrome Guillain-Barré o púrpura trombocitopénica en vacunaciones antigripales previas.

¿Podemos tener reacciones adversas?

Si, pero son poco frecuentes y suelen ser de carácter local y autolimitado

  • Reacción local (enrojecimiento, inflamación y dolor),
  • Fiebre, malestar y dolor corporal.

En caso de fiebre debe emplearse paracetamol y nunca ácido acetilsalicílico.

Las vacunas disponibles en España contienen los virus inactivos, por lo tanto no pueden causar una gripe como efecto adverso, pero al contener elementos del virus, tienen la capacidad de activar el sistema inmunológico para producir anticuerpos.

Las síntomas catarrales después de la vacunación se deben a una infección asociada a otros virus, infección anterior de la generación de la inmunidad tras la vacunación, o infección por otra cepa del virus no incluida en la vacuna.

¿Por qué hay que vacunarse cada año?

Los virus de la gripe varían cada año y las vacunas se adaptan en su composición para inducir mayor inmunidad.

Por otro lado el nivel de anticuerpos disminuye con el tiempo y a la siguiente temporada la inmunidad adquirida puede ser insuficiente para la protección adecuada.

Vacunación y COVID-19

No se conocen las contra indicaciones para vacunar a las personas que han superado la COVID-19. Es mas, en caso de tener secuelas tras el paso de la infección se corre el riesgo de tener consecuencias graves tras el paso de la gripe, sobre todo en caso de grupos de riesgo, como es el caso de enfermedades crónicas respiratorias.

Para minimizar el riesgo de transmisión se recomienda posponer la vacunación hasta finalizar los días de aislamiento.

En el año marcado por la crisis sanitaria causada por el coronavirus, cuando ocupación de camas hospitalarias llega a los limites, la reducción de incidencia de cualquier otra enfermedad grave tiene aún más importancia. En caso de la gripe tenemos las herramientas disponibles y eficaces para prevenir la infección y sus complicaciones.

La sintomatología en muchos casos  parecida entre el resfriado (con afectación mayormente de vías respiratorias altas), gripe y COVID 19, mas el posible agravamiento de las dos últimas, podría llevar a una saturación de nuestro Sistema Sanitario. La campaña de Salud es una manera de controlar al menos los casos de gripe.

Añadimos un cuadro orientativo de los síntomas más comunes

La campaña de vacunación contra la gripe esta temporada ya esta en marcha. Si todavía no te has vacunado ponte en contacto con tu médico e infórmate.

Cuanto más personas vacunadas, más se frena el contagio y más protegemos a las personas sin posibilidad de vacunación y con riesgo de salud.